miércoles, noviembre 17, 2004

Otro día más...

Seguimos con la mala racha, estando en el entrenamiento de Basketball salto y le parto la nariz a una chica con la cabeza, lesión número 1. Continuamos, el centro titular del equipo pisa mal y se carga los meniscos (según la fisioterapeuta), lesión número 2. Seguimos, brinco para anotar, me hacen falta y me truenan un dedo con todo y uña, así en medio de un poco de sangre y colgando por la mitad me arrancan el pedazo inerte. Pese a lo anterior parece que a la mala suerte no le parece suficiente y termino heroicamente una jugada, partiéndome el tobillo derecho. Ahora yo me pregunto, con las lesiones actuales más la chica que se lesionó (también el tobillo) durante el partido pasado, ¿Quién chingados va a jugar el domingo?, aparte de que aún me duele, estoy hasta la madre de esta pinche racha de días gafe, ah! y encima se enojaron conmigo, por exteriorisar cosas que tal vez no debería, cuando entenderé que la sinceridad no lleva a nada bueno. Espero las cosas empiecen a mejorar antes de que comience a pensar en pegarme un tiro, pero no, como diría Florentino Ariza: lo malo de morir un día es no morir de amor. Entonces mejor no me pego nada.
Mañana junta en el despacho general con mis arrendatarios, arreglarse bonito y hablar con determinación, a ver como nos va.
Ahora tratando de endulzarme la noche abogo a mi último fusil - con parte de mi cosecha - de una rola que salió hoy en Los Simpsons.

Quizás me asombre la manera que tengo de quererte, quizás me asombre tu manera de mirarme y entenderme, quizás me asombre la forma en que te necesito, pero lo que más me asombra es la capacidad que tienes para lograr girarme el mundo aún en las peores circunstancias.

No lo sabes pero cuando todo va mal mi manera de volverlo mejor es pensando que podrías aparecer de pronto y decirme que todo va a estar bien, aunque fuera mentira lo creería por que el sólo hecho de que estuvieras ahí me indicaría que efectivamente las cosas están mejorando.

No hay comentarios.: