lunes, junio 21, 2010

Rol Model

Hace días que he estado pensando en la teoría de que somos lo que vemos. No al 100% pero sí en gran parte. Por más que intentamos ser originales, por decirlo de alguna manera, imitamos en gran medida lo que hemos visto y aprendido por años. Imitamos a nuestros padres, a nuestros hermanos, a nuestros maestros y a veces hasta a ciertas figuras públicas que ni conocemos. El dilema está en saber escoger el rol model a seguir. Es fácil imitar a alguien y así librarse del peso de ser uno mismo. Es fácil imitar a alguien que hace las cosas mal, porque la mayoría de las veces hacer las cosas bien cuesta mucho más trabajo. Lo que no es fácil es tratar de ser mejor tomando de base una persona que es increíble.


Recuerdo que una vez en un entrenamiento de Basketball nos pusieron un regaño de miedo. Todo se basaba en que éramos muy personalistas. Síndrome de estrellas. No sabíamos jugar en equipo y cuando alguien se equivocaba hacíamos notar el error y queríamos hacer el cambio enseguida. El entrenador interrumpió los gritos para decirnos que era mucho más efectivo imitar lo bueno de cada jugadora, en vez de hacer notar sus defectos y así brillar las demás. "Deberían decir: yo quisiera tirar como fulana", "yo quisiera botar el balón tan bien como mengana", "yo quisiera correr tanto como sutana" nos dijo. En definitiva tenía razón. Quejarnos de alguien no nos daba ningún beneficio. Imitar y tratar de emular las habilidades de alguien sí era productivo.

Es una pena que a veces se escojan modelos a seguir que no valen la pena. Siempre hay un momento en que tienes que decidir si izquierda o derecha, si quieres ser el mismo borracho que tu papá o no beber. Si quieres ser un hijo de puta o un santo. En todo caso lo que más vale es saber distinguir los matices. Aprender que no se necesita ser un cabrón para que te vaya bien, solo se necesita ser inteligente. Entonces es mejor seguir a alguien inteligente que a un cabrón.

La capacidad de discernir, el sentido común y la empatía son cualidades humanas difíciles de encontrar en el... humano. Sin embargo el mundo está lleno de rol models que valen la pena.

Yo por ejemplo, cada vez que escribo me detengo a pensar en mis maestros de español, en mis amigos que leen, en mi papá. Siento una vergüenza tremenda al ver que se me fue un "gentes" pensando que ellos, me darían un puntapié. Cada vez que me siento a escribir me esfuerzo por hacerlo mejor y ser de alguna manera como ellos. Cultos, educados, intelectuales, inteligentes.

Cuando juego algo me acuerdo de mi hermano que siempre me decía: "En el momento en que pisas la cancha lo demás deja de existir. No hay problemas de la escuela o el trabajo, no te dejaron, no reprobaste, no estás enojada ni triste. Estás jugando y es en todo lo que tienes que concentrarte. Pisas la cancha y adiós" Y cada vez que piso una cancha doy todo hasta quedarme sin aliento.

Y así en muchas cosas de mi vida tomo lo mejor de la gente que me rodea, que ha estado en algún momento y trato de hacer lo mejor, de dar lo mejor y de ser mejor en lo posible. Insisto, el punto clave es saber escoger ese rol model. Creo que no se vale decir: "si hubiera tenido un buen maestro de matemáticas, no las odiaría". Yo tuve excelentes maestros y las odio. Pero aprendí que efectivamente son importantes. No se vale decir: "si mi papá me hubiera exigido más yo no trabajaría de mesero" Eso es solamente falta de ambición, es escoger el modelo más fácil. Siempre es mucho más difícil pagarse la universidad, trabajar y estudiar, que esperar a que papá la pague y mamá nos levanté para que no se nos haga tarde.

Somos muchas cosas, y entre ellas lo que vemos. Yo escojo lo que a mi juicio es lo mejor y lo más prudente. Siempre dicen que es difícil encontrar a alguien a quien querer, enamorarse, encontrar una pareja ideal. Yo creo que es mucho más difícil encontrar alguien a quien admirar. Alguien que te provoque ser como él, como ella. Encontrar un héroe. Y a veces se da ese remoto caso como el mío, que tengo varias figuras importantes y además, esa pareja ideal que ya encontré, tiene toda mi admiración. Ahora espero que algún día, en unos años, pueda convertirme en alguien a quien admirar también. Aunque sólo sea por echar tanto choro.