viernes, junio 29, 2007

Un poco de él

Ultimamente todo me sale bien, generalmente me da miedo decir este tipo de cosas por aquello de que "se salan" pero esta vez más bien me reconforta sacarlo. El miércoles, día del honorable cumpleaños de mi madrecita, me entregaron el coche, ni hablar de lo increíble que está, me encantó. Ese día mis papás mencionaron lo contento que estaría mi hermano porque el coche tiene un león, "Ay, con lo que le gustaban los leones" dijo mi mamá como mirando a través del motor, a través del tiempo.
Me he preguntado infinidad de veces cómo sería mi vida si mi hermano todavía figurara en el esquema, si fuera parte de ella. Generalmente la imagino muy buena aunque no mejor que ahora, simplemente diferente. Me he dado cuenta que tendría que disculparme por demasiadas cosas, creo que mucho tiempo lo traté como mi hermanito cuando era mi hermanote, el se dejaba, era de esos hombres que no discute mientras no le afecte. No lo sé, supongo que era causa de ese instinto sobrepretector que tenemos las mujeres y a veces, por prepotente, uno de esos defectos que tengo yo.
Todas las cosas verde fosforescente me recuerdan a él. No, no era su color favorito ni nada por el estilo, pero no le gustaban los estereotipos, odiaba esas ondas de vestir a los niños de azul y a las niñas de rosa, y que un color neutral era el verde.
Cuando yo era pequeña compraba todos mis juguetes verdes, era mi color favorito, y mi hermano a veces también lo prefería. Sus comentarios, relatos y enseñanzas se me quedaban tan marcadas que a veces hacía o decía cosas como él sin darme cuenta. Una vez compramos pistolas de agua fosforescentes, sólo había una verde, mi hermano ante tal controversia, tomó resignado la azul y me dio la verde pegajoso sin discutir. A veces cuando jugábamos yo le decía: "hoy podemos intercambiar pistolas" y sonreía. Desde entonces el verde fosforescente me recuerda a él.
Es impresionante ver cómo el tiempo va borrando las cosas, borra las que no eran importantes y empieza a exaltar las que lo son. Una de las cosas que más me impactaba era que no lo extrañaba, que nunca me dolió que se fuera, que la verdad no sentía nada, quizás porque estaba demasiado ocupada siendo una mujer de mundo, ja! a veces cuando me acordaba de él me acordaba de las cosas tontas, de las discusiones, de las fotos que me hizo perdedisas y me enojaba, me enojaba tanto que casi agradecía por no tenerlo enfrente y partirle la nariz. Ahora después de mucho tiempo -y no tanto- me acuerdo de eso y me vale, hasta me da un poco de risa, ahora comienzo a extrañarlo, me da coraje no poder compartir todo lo bueno que me pasa con él, no poder darle un poco de eso bueno y hacerlo parte de ello. Extraño llegar a ese punto donde creo que no hay salida y voltear y verlo a él, siempre tenía una respuesta, siempre sabía cómo ayudar, y sabiamente, sabía cuando callarse y hacerse a un lado sin chistar. A veces cuando yo necesitaba algo, sólo lo comentaba, decía que me hacía falta alguna cosa y uno o dos días después aparecía mi hermano con eso, o me decía: "ya te conseguí eso, ya no lo busques". Era un hermano mayor tradicional y a la vez poco común. Mi hermano no sólo me integraba a su vida y su entorno, sino que se integraba al mío sin necesidad de jalarlo, se volvía amigo de mis amigos, el galán de mis amigas, el protector de la banda, el que nos compraba alcohol en la prepa, el que siempre estaba de alcahuete y por supuesto, el que nos sacaba de probelmas cuando ya nos habíamos metido hasta las orejas en una bronca. Jamás preguntaba nada, él se limitaba a resolver el rollo y a manera de regaño, sólo nos lanzaba una mirada como de decepción, seguida de la frase: "me hablan si se vuelven a meter en p..." Cuando en casa comenzaban los gritos, regaños y pataleos mi hermano salía disparado a "hacer el quite" no recuerdo una sola vez que me hayan regañado sola, aunque mi hermano no tuviera nada que ver, no permitía que se gritara en casa y siempre reducía mis condenas aunque la mayoría de las veces implicaba aumentar o provocar la suya. Sí se quejaba, mucho y muchas veces, pero podías regalarle un chocolate y se le olvidaba hasta de que se estaba quejando, era feliz con cosas simples. También era chistoso, siempre te pedía de lo que estuvieras comiendo o bebiendo aunque no supiera que era, miles de veces tuvo que correr al baño porque eran cosas que no le gustaban, pero no dejaba ni que le explicaras que no era algo de su agrado. Era medio sonámbulo, tiro por viaje amanecía en mi cama y nunca se acordaba como había llegado ahí. También hablaba dormido.
Me da miedo que a veces hablamos de él como si se hubiera muerto. Mis amigos, sus amigos, mi abuela, mis tíos, me preguntan: "¿Y que has sabido de tu hermano?" esperanzados a que yo sabré algo, seguro. Es extraño hablar de alguien como si estuviera desaparecido, cando sabes exactamente donde está.
Ultimamente pienso mucho en él, sigue pareciéndome extraño festejar, cumpleaños, éxitos, logros, sueños hechos realidad, sin él. También creo que en estos 2 últimos años habría cometido mucho menos errores, habría derramado menos lágrimas y me habría arrepentido de mucho menos cosas si hubiera estado conmigo. Ahora son 25 años, no festejo con él desde los 22 y aún quisiera verlo en la fiesta, entre todos nuestros amigos, diciéndome: "salud carnalita, ya baja esa panza".

lunes, junio 25, 2007

y cae en mi cumpleaños...

Pinches gays. Es todo lo que puedo decir. Resulta que la marcha GLBT (Gay, Lesbian, Bisexual, Transgender) es este sábado 30 de Junio, bendito sea que yo me largo a cuernavaca y ni me enteraré. A muchos puede sonarles incongruente de mi parte que me queje de la marcha. Aclaro que no tengo nada en contra de los gay, de hecho sería bastante estúpido de mi parte, pero las marchas (igual que las manifestaciones) me re-encabronan. Vamos a ser lógicos, ahí van la punta de "locas" y lady-men con sus banderitas de porquería y sus letreros de "Igualdad para todos" pidiendo LOS MISMOS DERECHOS que los DEMAS. Vamos a ver. Por "los demás" entenderemos "heterosexuales", por los mismos derechos entenderemos "los derechos de los heterosexuales". Lo que entiendo yo es que quieren tener una vida igual a la de un heterosexual pero follando con los del mismo sexo. ¿Cierto?. Pues bueno, lo que hagan en la cama ¡me vale madre! y a los políticos, niños, padrecitos, ancianos y el mundo ¡le vale enteramente madre! Sean lógicos. A mi me importa un pepino si salgo de mi casa y veo a 2 weyes dándose un beso, o 2 chavas, me vale si estoy en un restaurante o el cine, y entra una parejita de gays ridiculamente tomaditos de la mano, y cosas así. No me importan los antros ni que la zona rosa se haya vuelto la zona arcoiris, no me importa nada pero por Dios, sean congruentes, ¿cuándo han visto a un montón de heterosexuales peleando por sus derechos?, ¿Cuando han visto una bandera heterosexual?, ¿A qué heterosexual perdido han encontrado gritando que está orgulloso de ser heterosexual?, Si quieren lo mismo, y la igualdad y no sé que tanta estupidez, ¿porqué a los heterosexuales les siguen llamando "la gente normal"?, ¿pos que son los gays?, ¿extraterrestres?. Los heterosexuales no exaltan el orgullo de serlo, no hacen marchas en pro de sus preferencias sexuales, no tienen una bandera, ni sitios especiales, ni se les niega o concede preferentemente la entrada a ningún lugar, y se les discrimina del mismo modo en diferentes lugares; ¿Cuándo han visto entrar a un zahuaripa pelos parados a Paladium?. Yo creo que si la idea es la "igualdad" deberían de empezar a comportarse como "iguales", dejarse de pendejadas pues. Ser gay es una preferencia no un acto heróico del cual estar orgulloso, ser gay es bronca de cada quien, entonces traer la banderita hasta en la frente pa' que todo mundo lo sepa no tiene ningún sentido. Tener una zona exclusiva de gays implica que las demás zonas son restringidas, si se dejaran de pendejadas y se metieran en cualquier lugar hace mucho que nadie se sorprendería si en la mesa de al lado hay 2 weyes haciendose piojito.
Sí hay mucha gente idiota que tienen la idea de quemar vivos a los homosexuales, pero también hay gente idiota que quiere deshacerse de los negros, de los chinos, de los gordos, de las protitutas, etc. Lo que pasa es que las ondas de los gays son las más difundidas y por eso tanto alboroto.
Para pedir igualdad hay que ser igual desde el principio. Es como pedir que todo el mundo llegue temprano cuando uno es el primer tarado que llega tarde.
Si un heterosexual no hace marchas, ni tiene días internacionales, ni se comporta distinto a la mayoría de la gente entonces un gay, para ser igual, tampoco debe.
Los hombres vistanse como hombres, hablen como hombres, comportense como hombres, el día que quieran adoptar un hijo, creánme, ante el juez es más respetable un cuate en traje y corbata que habla propiamente que un idiota barbón en vestido diciendo: "ay manis, yo tengo dentro el don de madre". Y es respetable porque es "como los demás", como eso que pretenden lograr con sus marchas. Las mujeres lo mismo.

En fin. Yo no soy cerrada ni mucho menos, jamás le haría daño a nadie y mucho menos juzgaría de mejor o peor, no soy quien, pero neta, la congruencia, coherencia y sentido común es lo que nos lleva lejos, lo que nos saca adelante. Entonces, ¿Porqué es de lo que más se carece?

lunes, junio 11, 2007

La era de la discrepancia

O de la decadencia, no sé. Después de mucho leer me he dado cuenta que mi blog se ha convertido en un vil teleguía cybernético, solo que con menos categoría (sí, aún menos). Cual libro semanal redacto mis ideas, experiencias y demás aventuras cual novela del carnal de las estrellas. Puro sufrimiento, puro amor. Cuando no soy la mala, soy la mártir y sino, ahí voy contando lo heroico de mis acciones ante el sacrificio de mi felicidad por la de alguien más... zaz, mi hermano ya estaría diciendome "carnala, eres patética" con su cara de "esperaba más de ti".

La verdad es que yo también esperaba más de mí, pero creo que llegué al punto medio donde no sabes si bajar o subir, si ir para la izquierda o para la derecha. No sé, me he vuelto desidiosa y floja, más vale madre que de costumbre y muy a mi pesar un poco derrotista, a punto de caer en las garras de Frank Miller y terminar en un día de furia. No es que esté enojada con el mundo, tampoco es que me vaya mal en la vida, la verdad es que últimamente me va muy bien. Pero todo me da mucha pero mucha hueva.

5 años de partirme la cabeza estudiando numeritos, creando proyectos, haciendo proyecciones, aprendiendo a vivir del otro lado del atlántico y aquí estoy, en una ciudad llena de ruido y smog saliendo a trabajar a las 8:00 de la mañana para diseñar banners en 5min, comprar boletos de avión y organizar viajecitos. Damn, debí haber sido bombero o seguir mi vocación de rockstar. Quien sabe, a lo mejor habría sido un buen abogado, y con la mente perversa que tengo seguro habría ganado millones. Pero recordemos que me he vuelto floja y desidiosa, me da hueva hacer lo que hago pero salirme a buscar otra cosa... me da más pereza aún. Caray, creo que también me está pegando el conformismo.

El triste coche me tiene hasta las pestañas. En que momento estúpido de mi vida se me ocurrió cambiar de coche, y en que momento más estúpido se me ocurrió deshacerme del que tenía antes de ver si podía comprar el otro o no. Seguro lo haré pero aún creo que mi alma es un precio demasiado caro para un mugroso peugeot. Lo sabremos esta semana.

La gente... ay Dios la gente... no sé si todo mundo se largó a otro mundo sin avisar o yo me fui sin darme cuenta porque nada es igual y no me entero de nada. Que se casó mi antiguo mejor amigo, el que fue mi primer novio, el que se ganó el premio al neandhertal del año en el tequilatón, y yo ni me enteré. Que van a operar a Vivianita de la espalda porque no sé que le pasó y a lo mejor no puede ir a mi cumple. Que Joel no puede salir conmigo porque su novia me odia, y la de Javier también. Que Gema renunció por fin a ese desgraciado trabajo y que ya va a terminar la maestría, que se va a E.U. no sé a que. Que Karla al fin dejó Guadalajara y explorará el mercado gringo haciendo uso del talento histrionico, dice. Que entre España y México tengo 5 enamorados, que uno incluye a mi ex, ja! que Raulito quiere hablar conmigo (ni madres, ese wey se quire casar). Que me van a llevar al concierto de Travis y no sé ni cuando es. Que mi vieja ya se cambió de casa y quiere que le ayude a pintar. Que nos vamos de crucero en Diciembre (¿¡¿en invierno?!?) o a Disneyworld. Y así, casi que tienen planeada mi agenda y yo sin saber. De no ser porque los 5min que paso en mi casa mi madre me pone al día no sabría ni que hoy tengo cita con el médico.

Hace mucho que no uso el teléfono y por lo mismo hace mucho que no hablo con nadie. Hoy planeaba llevar un regalo, pero el fin de semana decidí que era mejor no hacer nada, porque siempre funciona y porque estoy cansada de discutir y no quiero que se preste a malas interpretaciones. Hoy quizás pida un favor que va a mover los esquemas de una manera muy rara, pero aún no estoy segura, no me gusta deberle nada a nadie. Hoy voy a ver a alguien.

Siento que mi vida ni va en picada ni va en subida. Está simplemente plane. En 2 semanas es mi cumple, estaba muy contenta pero ahora también me da flojera, tanto planear y vamos a ir 6 gatos a embriagarnos en cuernavaca, eso sí, 6 gatos muy divertidos. Hago extensa invitación...


El post pasado escribí "botox para el corazón" esta vez creo que la receta va del tipo: "botox para el día a día" porque últimamente las semanas se aflojan.

lunes, junio 04, 2007

Feelin sick

Hoy lei uno de esos fabulosos nicks que exaltan nuestra imaginación; "botox para el corazón... por el rudo uso cotidiano". Pensar que lo único para mantener el corazón firme fuera botox.
Yo no sé que me pasa pero algo anda mal en mi sistema. Tengo un desgane increíble, ahora que vendí el coche en vez de estar contenta porque compraré uno nuevo me siento como despojada, como si una fuerza extraña y ajena hubiera hecho que lo vendiera y no la convicción propia. Este asunto de las burbujas está poniendo a trabajar mucho a mi organismo, pienso mucho, siento mucho y mi sistema nervioso central anda más bien yendose del lado, es impresionante como una idea se te puede meter en la cabeza y no para de dar vueltas, vueltas y vueltas sin descanso. Que fácil sería que el cerebro y el corazón fueran codependientes, de modo que si el cerebro da una orden el otro tuviera que responderla y viceversa, en vez de esta maldita lucha entre la razón y el sentimiento, entre la sensatez y la locura, siempre la misma guerra sin final.
Mañana termina mi contrato. Tendrán que decirme si me quedo de planta o me voy, porque de temporal no pienso quedarme 1 sólo día más, seguramente me darán la planta, creo. Pero no sé si quiero. Es un trabajo cómodo, pero no hay para donde crecer, no a corto plazo y la verdad es que me queda chico, digo, sin afán de ser prepotente, tengo una maestría y me dedico a sacar copias y hacer inventarios...
No me responden de la escuela acerca del título. ¿Habrá algún problema?, ¿Querrán que siga pagando créditos como si fuera una hipoteca?, no lo sé porque "no se permite dar informes por teléfono", no sea que Bin Laden llame diciendo que soy yo y le den mi título. No tengo tiempo de ir allí personalmente ¿y mi coordinador? seguramente en Bali porque no hay manera de localizarle ni por mail.
Tengo un mal presentimiento, es eso, por eso tengo el estómago revuelto, la cabeza dispersa, la mirada borrosa y me molesta la luz. Por eso traigo esa cara que provoca que me pregunten sin cesar: ¿Que tienes Vero? desde el viernes. Esto es mi clásico mal presentimiento. ¿Pero que será?, ¿la chamba?, ¿mi casa?, ¿mis amigos?, ¿mi partner?, ¿lo de siempre?. Tal vez sólo sea el alcohol que finalmente en su exceso ha terminado por volverme loca. Sí, debe ser cosa del alcohol.