jueves, agosto 27, 2009

Horóscopo

El miércoles estaba leyendo mi horóscopo y decía entre otras cosas: "con los amigos, regresaran personas que te llena demasiado". Pensé como todo que era un tontería y no hallé quien pudiera regresar de mi pasado que "me llenara demasiado", pero pasó.

Ayer saliendo del cine me lo encontré. La verdad es que vi a alguien sentado ahí de reojo y no lo reconocí enseguida, iba a pasarme de largo, pero él también volteó y se me quedo mirando, así que tuve que detener un poco el paso y entonces supe que era él. Para mí, su cara no fue una sorpresa usual, más bien esa cara como si estuvieras viendo un fantasma, pero te das cuenta que es una persona y te alivias. Yo no sé qué cara habré puesto, pero estoy segura que no una muy normal.
Francamente no me acuerdo cuanto tiempo tenía sin verlo, como mínimo 2 años, aunque yo pensaría que hace unos 4 que ni sus luces. Y bueno, aunque no esté muy de acuerdo, uno tiene que hacer lo que uno tiene que hacer para estar bien, y para que él estuviera tranquilo, tenía que cortar relaciones.

Estamos muy diferentes, y no. Él tenía más barba y yo lentes, él con uniforme y yo con traje, él con filipina y yo con gafete, él con unos amigos y yo con Castor. No sé, fue raro. Lo fue después al menos. Cuando me di cuenta que estaba nerviosa, como la primera vez que sales con alguien que te gusta mucho. No podía hablar bien y me movía demasiado, quería decir alguna cosa, una frase, un chiste, pero no lo lograba hacer bien y me reia tonta y descontroladamente. Lo veía, analizándolo al tiempo que pensaba: "que gusto ver a este wey". Al tiempo que me acordaba de muchas cosas y de nada al mismo tiempo. De verdad me dio gusto verlo.

Fue muy exótico que coincidiera con el horóscopo. Hace años que no sabía nada de él y apenas hace unos días encontraba sus comentarios acerca de una foto de la prepa, y de pronto ¡zaz! face 2 face. Creo que no esperaba encontrármelo nunca, y me movió muchas cosas. Todo el camino de regreso y un poco más, me pasé contándole al Castor mil y una de nuestras aventuras.

Al final como era de esperarse, hice el comentario típico, y no lo niego, con esperanza de que pasara: "a ver si nos tomamos unas chelas un día de estos". Un día de estos... sé que ese día no llegará, estoy segura que no tiene mi phone y yo menos el suyo. Sé que esas chelas no llegaran, pero me hubiera dado muco coraje irme de ahí sin siquiera hacer el intento.

No sé si en otros 4 años me lo vuelva a encontrar, o nunca más, pero ayer me di cuenta que es una persona muy, muy importante para mí y que áunque lo había olvidado, lo quiero muchísimo. Ya veremos qué nos depara el destino, o mi horóscopo, al cual de ahora en adelante le haré mucho, pero mucho caso.

1 comentario:

Marcos dijo...

Las cosas no suceden porque sí. Es cierto y lo creas o no, todo, absolutamente todo está en conexión.

Por cierto, apunto el blog en favoritos, me lo encontré por casualidad y me gusta.

Un saludo.