lunes, junio 25, 2012

Instrucciones para cumplir 30

Creo que esta semana no podré trabajar. Se acercan los 30 y no dejo de pensar en la gran crisis que han traído consigo. Todo me ha llevado a rebobinar y ver el recuento de mi existencia. No. No estoy vieja ni asustada por estarlo, pero cumplir treinta es un cambio grande no importa lo que digan.  He hecho tantas cosas y me han faltado tantas otras. He conocido a tanta gente y se han ido tantos otros. A veces quiero dar un giro y volver a vivir los 23 o 24, a veces quiero los 17, a veces los 9, a veces todos al mismo tiempo y a veces también me quiero quedar con el ahora. No sé porque es tan complicado cumplir 30 para mí, no sé porqué pienso tantas cosas, no sé si son las elecciones o los astros pero sí me tiene pensando. En casa veo el techo, en la oficina la pared y no consigo concentrarme en nada. Voy a cumplir 30. Tal vez haya pasado la 3era parte de mi vida en un futuro muy alentador, o la mitad ya, no lo sé. Lo que sea lo he vivido bien, estoy donde quiero estar, no importa si es como lo planeé o no, estoy a gusto. También estoy a tiempo de recuperar cosas que he perdido, las “cosas” no por pasar el tiempo desaparecen, desaparecen cuando no las quieres de vuelta, para tenerlas sólo hay que hacer un esfuerzo. Así volvió esa pulsera de la Yaya que creí perdida, y volvió a mí ahora que tanto me hacía falta, así volverá mi bolsa de fotos o mi esclava, de alguna manera, no sé con que pretexto. Así volverá él, lo sé. Así volveré yo también, para estar más a gusto conmigo y con lo que me he convertido que no es tan malo como empezaba a creer, sólo es distinto.

Tengo tan buenos recuerdos de las pasadas 3 décadas y la ventaja de una memoria extraordinaria que me puede pasar filmes desde los 2 o 3 años hasta lo que me comí el fin de semana, a veces recuerdo momentos y sé qué llevaba puesto o qué canción estaba de fondo, y eso me encanta de mí, porque somos producto de nuestro pasado, porque sin él no seríamos lo que hoy somos. ¿Qué tiene uno sino recuerdos?, ¿Qué sería de nuestro pasado sin los recuerdos? Los recuerdos son lo único que da constancia de por dónde estuvimos, dónde pisamos, a quién le cambiamos la vida o cómo nos la cambió a nosotros. Pueden ser buenos, malos y regulares pero todos son los que dan cuenta en realidad de nuestra vida, perderlos sería trágico, por eso le tengo tanto miedo al Alzheimer. Porque también claro, los recuerdos te salvan de no volver a equivocarte o te recuerdan cómo hacías para ser feliz.

Mi vida ha sido feliz durante 30 años, mi vida es feliz ahora. Aún me da miedo que dije tantas veces que moriría a los 30 como los rockstars que tengo estrés de que ocurra, porque he tenido mucha suerte en la vida, y mis deseos se cumplen. Yo espero que esto no, sobre todo porque no es algo que haya deseado nunca, es sólo una frase que durante los 20s sonaba bien y me hacía sentir “forever young”. Me acuerdo de ese comercial que termina en: “a los 20 creía que la vida se acababa a los 30… ¿qué estupido no?” –que de hecho no es muy bueno porque no me acuerdo qué producto anuncia- y me río porque yo pensaba igual, y recuerdo que no me importaba mucho, pensaba que faltaba mucho tiempo y ese lapso era suficiente para vivir bien.

Me alegra que en este mundo el libre albedrío no signifique hacer nuestra voluntad y si es cuestión de desear pues yo deseo envejecer con el Cas, tener hijos, formar una familia, hacer crecer la que hay, establecer relaciones más fuertes, seguir con los amigos, seguir creciendo con todo lo que eso conlleve. Y si algún día “añoro” algo como diría la prima, para eso tendré mi memoria privilegiada, mis recuerdos que me sacarán una sonrisa. Tal vez a los 20 había más energía, pero a los 30 hay más poder adquisitivo y más libertad, eso balancea las cosas bastante bien. Me gusta platicar con alguien mucho más chico que yo y decirle. “ah, yo ya pasé por eso, déjame te explico…” me gusta acordarme cómo superé el obstáculo o cómo disfrute esa etapa y poderla compartir con alguien que apenas está en eso. Las crudas, los amores de prepa, la pasión por las prohibiciones, la carrera, el primer trabajo, los viajes… los madrazos, los grandes madrazos, los enormes madrazos y las levantadas. Qué tiempos aquellos ¡y qué tiempos estos! Antes vivía muy deprisa, y ahora creo que es momento de tomarlo con calma y en vez de correr como loca, empezar a disfrutar el camino, porque hay un montón de cosas que quiero detenerme a ver.

INSTRUCCIONES PARA CUMPLIR TREINTA

En el fondo, no hay nada que hacer. Siempre tendrás dieciocho, porque eres joven solo una vez, pero inmaduro para siempre.

No hay instrucciones para cumplir treinta. Pero si las hubiera, serían estas:

- Haz una lista de todo lo que no te gusta de ti y luego tírala. Eres el que eres. Y después de todo, no es tan malo como te imaginas un domingo de cruda.

- Tira el equipaje de sobra. El viaje es largo, cargar no te deja mirar hacia delante. Y además jode la espalda.

- No sigas modas. En diez anos te vas a morir de vergüenza por haberte puesto eso, de todas maneras.

- Besa a tantos como puedas. Deja que te rompan el corazón. Enamórate, date en la madre, y vuelve a levantarte. Quizás hay un amor verdadero. Quizás no. Pero mientras lo encuentras, lo bailado ni quien te lo quita.

- Come frutas y verduras. Neta, vete acostumbrando a que no vas a poder tragar garnachas toda la vida.

- Equivócate. Cambia. Intenta. Falla. Reinvéntate. Manda todo al carajo y empieza de nuevo cada vez que sea necesario. De veras, no pasa nada. Sobre todo si no haces nada.

- Prueba otros sabores de helado. Otras cervezas, otras pastas de dientes.

- Arranca el coche un día, y no pares hasta que se acabe la gasolina. (¡Cómo quiero hacer esto!)

- Empieza un grupo de rock. Toma clases de baile. Aprende italiano. Invéntate otro nombre. Usa una bicicleta.

- Perdona. Olvida. Deja ir.

- Decide quién es imprescindible. Mientras más grande eres más difícil es hacer amigos de verdad, y más necesitas quien sepa quién eres realmente sin que tengas que explicárselo. Esos son los amigos. Cuídalos y mantenlos cerca.

- Aprende que no vas a aprender nada. Pero no hay examen final en esta escuela. Ni calificaciones, ni graduación, ni reunión de exalumnos, gracias a Dios.

Felices treinta, viejo. Bienvenido al resto de tu vida.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

hola quisiera saber sobre elq dijo q iba morir a los 30 , yo tambien un dia lodije y ahora estoy mal porq o quiero q esto me pase

Vero Lopez dijo...

No lo recuerdo bien pero es de una canción de un rocker de los 80s. Realmente no puedes hacer que pase, la muerte no es un decreto, es la consecuencia de cualquier eventualidad. No la puedes llamar, ella viene ti en el momento que debe. En los 80s estaba casi de moda entre los rockeros decir que querían/iban a morir antes de los 30 porque el punk y el rock eran cool sólo para los jóvenes. Fue más bien un movimiento de rock ochentero. Ahora, te aseguro que no porque lo hayas dicho alguna vez, va a suceder. Morirse no es decisión de uno, ni siquiera si te suicidas, porque si no te toca, te logran salvar de alguna manera.